El club josefino sacó provecho de jugar en su estadio y obtuvo una victoria muy bien trabajada a un Club Sport Herediano FF que dominó gran parte del encuentro. Las visitantes se toparon a un Sporting FC bien ordenado atrás, y que supo aprovechar sus oportunidades dejándose así sus primeros 3 en la cuadrangular.
Un primer tiempo que fue mucho de calculo en la media cancha, donde las heredianas intentaban sacar provecho de cualquier balón a profundidad y ganarles las espaldas a las defensoras del Sporting. Sin embargo, fueron infructíferas ya que la única llegada de peligro fue de las josefinas, que tuvieron una oportunidad y la portera Fabiola Murillo se empleó a fondo quedándose con la pelota.
Al medio tiempo el entrenador herediano, Bernal Castillo, hizo ingresar a Yerlin Ovares para buscar más peso en el ataque y al minuto 50 llegó la anotación de las rojiamarillas. Ovares en un remate fuerte dejó sin ninguna oportunidad a la guardameta Zúñiga, parecía que se le venía la noche a la escuadra josefina.
Solo bastaron tres minutos para que llegara la igualdad de Sporting, por medio de Fabiola Villalobos que, desde el punto penal, puso el 1 a 1 para las locales. Después de esta anotación el equipo Herediano quedo golpeado, debido a que al minuto 58, por medio de Fernanda Chavarría, Sporting FC le da vuelta al marcador.
Después de ambos golpes, Herediano empezó a buscar la igualdad; sin embargo, la defensa de Sporting supo aguantar los embates rojiamarillos que al encontrar la muralla vestida de color negro se desesperó y se dio la expulsión de Gloriana Villalobos, que terminó de lapidar al equipo Herediano.
Además de la expulsión de la referente jugadora salieron con cartulina roja el estratega Castillo y su asistente Luis Obando.
Con este resultado Sporting FC suma los primeros tres puntos en la cuadrangular, empatando en unidades a Herediano, que ya está sembrado en una posible final. La próxima jornada tendrá a las florenses enfrentado a Saprissa como locales y a Sporting recibiendo a Liga Deportiva Alajuelense.
*Crónica escrita por Ricardo Salazar Mora